De haber sabido lo hubiese comentado antes: la Orquesta Sinfónica de Guayaquil reinició su cronograma de recitales hoy viernes a las 19:30, en el Teatro del Centro Cívico Eloy Alfaro. Me enteré de eso dos horas antes de la presentación, cuando fui a visitar a una amiga, y bueno pues: nos fuimos para allá.
Bajo la batuta de David Harutyunyan, la Sinfónica empezó interpretando la Danza Húngara No 1 de Johannes Brahms. Luego, el oboísta Jorge Layana López interpretó un solo de André Esphay. Después de un breve receso, la Orquesta concluyó con la sinfonía No 9, Opus 95 Nuevo Mundo de Antonín Dvorák.
Tal vez, la tonada más conocida de la sinfonía 9 de Dvorák sea el Allegro Con Fuoco, que cerró la noche con un prolongado aplauso de la audiencia.
Bajo la dirección de Harutyunyan, la Orquesta Sinfónica de Guayaquil ha realizado giras en España, Italia, Cuba, Perú, Argentina, Chile y Uruguay. Actualmente están gestionando invitaciones en ciudades de China y Líbano.
¡Bien por estos chicos! Sigan así representándonos y dejando el nombre del país muy en alto.
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